Massa o el kirchnerismo con rostro humano

¿De dónde sale el apoyo a Massa? ¿Por qué alguien lo elegiría a él en vez de elegir a Macri si ambos son opositores?

Hay una realidad: Por más que quieran despegarse lo cierto es que el Frente Renovador nunca dejará de ser una escisión del kirchnerismo. Y así como se los ve duros con el oficialismo nacional también se los escucha muy duros con el macrismo y el PRO.

El FR no es algo nuevo. Es un retorno al pasado. Pero no un retorno a los 90 o a la Alianza. Es un retorno al kirchnerismo. Al kirchnerismo de los primeros tiempos. Ese que arregló la deuda, que redujo el desempleo y que tenía superávit a tasas chinas. También el mismo kirchnerismo que benefició a sus empresarios amigos, tuvo sus primeros casos de corrupción y no supo (o no quiso) detener a tiempo la bola de nieve inflacionaria que hoy es una avalancha.

Pero a los ojos de la opinión pública ese kirchnerismo, el de Néstor presidente y Cristina senadora, es idealizado. Poco importa que ya en esas épocas ambos tenían discursos confrontativos y un manejo discrecional de los medios (con la maligna Corpo de su lado). Como no existía la Cámpora, no existía 678 y mucho de lo que hoy se sabe no se sabía (o se prefería no saberlo) esos años se consideran años felices.

El Frente Renovador representa un regreso a esos años. Sus referentes lo representan. Lo representa Sergio Massa, quien fue director del ANSES durante la presidencia de Néstor y luego supo ser Jefe de Gabinete de Cristina. Y lo representan también Lavagna, Solá, Giustozzi, Alberto Fernández, Redrado, Nielsen, Todesca, Cariglino, Othacehe, Katopodis y otros.

Ellos no son un cambio. Son un reinicio. Es volver a intentar el kirchnerismo. Es tratar de retomar el punto en donde "falló". Quizás sea por eso que la imagen de Massa haya caído conforme cayó a la del kirchnerismo, y en tiempos post-Nisman donde la polarización Scioli-Macri se hizo más fuerte Massa se haya debilitado.

Por eso Massa tiene votantes: No es kirchnerista, pero tampoco es opositor. Es el punto intermedio. Y es la garantía de que va a haber un cambio, pero no va a cambiar tanto. Apenas se van a suavizar las cosas.